Selfinterview a Pablo Del Campo.

Es una buena combinación entre creativo y empresario, lo que le ha valido para ser líder de la industria por más de dos décadas. Comenzó su carrera como redactor en Casares Grey, en Buenos Aires, y luego se convirtió en Director Creativo Ejecutivo en Young & Rubicam y Lautrec Saatchi & Saatchi, antes de fundar su propia agencia Del Campo Saatchi & Saatchi y de llegar a ser Director Creativo Mundial de Saatchi & Saatchi, para liderar la creatividad global en más de 140 oficinas en 76 países.

Inventor de La Batalla de las Superficies en 2007, este creativo que ganó el primer Oro en Cannes para la creatividad argentina, y luego fue el creativo más premiado, dice que es muy difícil tener ideas, así que cuando se tienen, hay que hacerlas sí o sí.

Reconoce como la fórmula de su éxito el haber sabido rodearse de buenos creativos y de buenos equipos de trabajo para hacer juntos un producto que ha sido reconocido. Un buen producto que ha generado una gran empatía. Porque para él, el trabajo debe ser capaz de generar la mayor empatía.

Del Campo siempre fue un creativo con una personalidad distinta dentro de un amplio espectro de personalidades fuertes. Su búsqueda de un gran trabajo lo llevó a compartir ideas con sus referentes en lugar de verlos como competencia, por eso se convirtieron en sus aliados. Su gran diferencial ha sido la constancia. Pero atribuye sus éxitos también a su gran vocación y a la capacidad de sobrellevar las frustraciones y saber esperar.

Nos cuenta que viajar a Cannes desde muy chico, incluso pagando su viaje él mismo, lo ayudó a construir su carrera y a hacer un mejor trabajo.

Fue Director Creativo casi desde que arrancó, siendo muy junior, lo que lo hizo liderar equipos, aunque no tuviera la experiencia. Y luego, al crecer, lo más importante para él siempre ha sido que de su agencia salgan las cosas, sin importar quién las haga. Le gusta generar los espacios y el bienestar para que de cada uno salga el mejor trabajo estando en la agencia.

Actualmente sigue trabajando para las marcas, pero desde el pensamiento lateral para encontrar la mejor manera de comunicarse con la gente. Quiere encontrar ideas más grandes que avisos, que puedan ser sostenidas por las marcas o por sí mismas.

Sin embargo, él mismo se adelantó a esta búsqueda, cuando en 2007 ideó La Batalla de Las Superficies, el gran partido de tenis entre Federer y Nadal en una cancha mitad césped y mitad polvo de ladrillo (Wimbledon y Roland Garros). Un evento de impacto mundial que adelantaba el éxito en la creación de contenidos para la publicidad.

En la Selfinterview de Pablo Del Campo, además de dejarnos conocer su pensamiento y trayectoria, este inquieto creativo nos cuenta de sus incursiones como director de teatro y escritor y nos habla del libro “El Drama de la Página en Blanco”, escrito por él y que relata el drama que enfrentan los creativos cada vez que deben pensar algo por encargo. “Cada quien tiene su método para que las ideas salgan y este libro recorre los distintos métodos, no dice”.

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